Vanessa Salas Vargas
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Soy ilustradora y siempre he realizado impresiones, por lo tanto sé que tengo que entregar archivos con requerimientos especiales (lo cual hago), desde que me hicieron la cotización el precio fue muy elevado pero quise darles el beneficio de la duda, cuando fui a realizar el pedido la persona que me atendió andaba desganada y casi casi estaba “ haciendo el favor de atenderme” no obstante me contuve, durante el proceso se tardaron mucho porque sus computadoras están muy lentas, me dijeron una fecha por teléfono y en persona aumentaron dos días, les entregué archivos en todas las terminaciones solicitadas en la cotización para que usaran el que más se adaptara lo cual no tomaron en cuenta, tuve que corretear al diseñador porque no me mandaba los correos, pregunté por correo si la impresión final se vería así de baja calidad y me dijo que no; hoy que fui a recoger mi pedido me llevé un muy mal sabor de boca, las impresiones más malas, sucias y mal tratadas que me han hecho en toda mi carrera, una calidad de color mala ( a pesar de haberlo programado en CYMK), un recorte mal hecho en la imagen ( a pesar que y’a lo había entregado sin fondo ), y a parte sucio el acrílico, cuando hablé con el encargado ni supo qué inventarme para hacerse ver que ellos no tenían la culpa. Honestamente no vale la pena siquiera pararse a pedir informes.